Continuamos la entrada comenzada la semana pasada sobre la energía geotérmica hablando de tres temas tan importantes como la misma tecnología. Los costes, la investigación, las instalaciones y el rendimiento.
Costes
Los costes de estas instalaciones varían desde los 32 €/MWh a 120 €/MWh. Sin embargo dada la variabilidad existente en los distintos yacimientos, es difícil estimar el coste a grandes rasgos. Normalmente el aspecto más caro es la perforación, debido a la complejidad de la misma por tratarse de profundidades muy elevadas. Los costes se desglosan por fase del proyecto: identificación de recursos, de perforación y la construcción de plantas de energía. En general, entre el 1% -3% de los costes se producen durante la fase de identificación, con los costos de los proyectos restantes se dividen entre la perforación y la fase de construcción. La distribución de los costes de los componentes fluctúan en función de la temperatura y la profundidad.
Investigación
Es necesario invertir en investigación para poder reducir costes y aumentar la eficiencia de las plantas geotérmicas. Los objetivos a medio-largo plazo han de concentrarse en la localización de recursos y la perforación. Respecto a las primeras, hay que mejorar el conocimiento del subsuelo y lograr un mapeo más exacto. La perforación presenta mejoras graduales pero existen investigaciones recientes que aplican el láser o quemado de piedras para facilitar la perforación y que pueden ser de gran ayuda en un futuro.
Instalaciones
Las plantas geotérmicas convencionales suelen utilizar grandes generadores de corriente alterna que son funcionalmente equivalentes a los generadores convencionales fósiles alimentando la red con altos voltaje. El sector de la geotermia en la actualidad por lo general proporciona energía continua, es decir de base. Los recursos geotérmicos tienen una alta disponibilidad (poseen un factor de utilizacióndel 96%)
Mientras que las plantas geotérmicas no son consideradas como generadores de variables, su producción es parcialmente dependiente de la temperatura. La producción eléctrica a partir de una planta de energía geotérmica es controlada por la temperatura de la fuente y la reserva de temperatura del disipador (es decir, la temperatura a la cual el calor es rechazado de la planta de energía). Dado que las fuentes de calor para instalaciones de energía geotérmica son más bajas en la temperatura que las de las centrales térmicas convencionales, la producción de la planta geotérmica es más sensible a los sistemas de refrigeración. La mayoría de las centrales geotérmicas utilizan sistemas de refrigeración por agua, típicamente en forma de torres de refrigeración. Debido a la condensación del fluido geotérmico que sale de la turbina, no se necesita un suministro externo de agua. A pesar de ello, algunas centrales eléctricas binarias utilizan los sistemas de refrigeración por agua, la mayoría de ellas con condensadores de aire. La eficiencia de las centrales eléctricas con sistemas refrigerados por aire disminuye a medida que aumenta la temperatura ambiente, de modo que los sistemas enfriados por aire presentan mayor variabilidad diurna y estacional que los sistemas de refrigeración por agua.
Rendimiento
El rendimiento de la producción de un yacimiento geotérmico puede disminuir con el tiempo por dos razones. En primer lugar, la presión del fluido geotérmico en un depósito hidrotérmico puede disminuir. Esto es a menudo reducido por la reinyección de fluidos refrigerados geotérmicos, o por la inyección de fluidos suplementarios. En segundo lugar, las temperaturas de depósito pueden disminuir si el calor se extrae con demasiada rapidez. Esto puede ser mitigado mediante la reducción de los caudales de bombeo, aumentando el área de superficie de fractura, o la perforación de pozos adicionales. Estas características son importantes en el diseño sostenible de los yacimientos geotérmicos para conservar un rendimiento alto un periodo largo de tiempo.
